
Te juro que no son nada caros, y que este regalo vale ya por mi cumple, mi santo y por los de navidades. Fíjate, los más baratos sólo cuestan medio millón de euros y luego les puedes poner muchos más gadgets, como cabezas nucleares. Además son muy chulis, los puedes controlar por satélite, cambian el rumbo comparando las alturas del suelo con un plano digital y PUM, aciertan en el blanco. Mola un puñao.
Si, ya se que te había pedido mucho menos, que sólo quería un kit de ayuda humanitaria para mandarlo a Níger. Que los primos de la FAO nos habían pedido algo de dinerillo para comprar semillas de cereal y legumbres, pero fíjate que los suecos que son muy enrollaos ya han enviado 650.000 dólares de los 4 millones necesarios. Ya verás como en cuanto salgan algunas imágenes en la tele de los niños muriéndose se recaudan esos millones y muchos más.
De todas formas, con la campaña que están haciendo, los 2,5 millones de personas, amenazados por la falta de alimentos, incluidos unos 800 000 niños, saldrán adelante. Si no es con ayuda humanitaria, será pagando, como dice MSF:
“Sin embargo, y a pesar de la gravedad de la situación, la atención médica y los alimentos siguen siendo de pago, a precios inaccesibles para los más vulnerables.”
Venga mami, cómprame un Tomahawk, que el Tío Donald nos ha dado permiso y ahora nos quiere tanto como a José Mari.